El pragmatismo de Kevin Durant: si no puedes vencer a tu enemigo, únete a él
Después de 10 años en la NBA, Kevin Durant finalmente puede mostrar el ícono más preciado: el anillo de campeón. Durante 9 temporadas, el número 35 guió a los Oklahoma City Thunder a los playoff, incluso hasta una final; pero siempre faltó el punto clave, en el momento decisivo. Entonces, tras la remontada de 1-3 de los Warriors de Golden State, en la final de conferencia de la temporada 2015-16, KD decidió que, si no podía vencer al “enemigo”, lo mejor era unirse a él…y más cuando le pagarían 54 kilos por dos campañas.
Su paso a los Warriors fue considerado una “traición” por los fanáticos del Thunder. Algo similar vivió LeBron James con aquella “decisión”, transmitida por televisión, en la que anunció que “llevaba su talento” al sur de la Florida. En Ohio poco faltó para que incendiar...