Retorno al podio olímpico
Los Juegos de Ciudad México, en 1968, siempre serán recordados por varias marcas sobresalientes logradas en la elevada altura sobre el nivel del mar de la sede. Un salto bastó para ofrecerle la inmortalidad a Bob Beamon y no fue uno cualquiera, pues la marca de 8,90 metros se mantuvo como récord mundial durante 23 años. En México, Cuba presentó una delegación conformada por 138 atletas, de ellos 16 mujeres, en 14 deportes.
En San Luis 1904 nuestro país alcanzó cuatro medallas, todas de oro, en gran medida por el esfuerzo de Ramón Fonst. En 1968 también se alcanzaron cuatro preseas, aunque en esta ocasión resultaron plateadas. Después del triunfo revolucionario de 1959, el deporte recibió una mayor atención por parte del gobierno y los resultados fueron mejorando notablemente en los pr...